miércoles, 7 de octubre de 2009

LA ADULTERADISIMA

Se fijaron en la monumental campaña publicitaria que induce a la población al consumo compulsivo de lácteos.
Es francamente abrumador ver los minutos en radio y televisión y los centímetros dedicados en diarios y revistas a productos tan nuevos como dudosos (Actimel, Vidacol, variedad de yogures y leches aditivados por infinidad de minerales a gusto y piaccere de los fabricantes).

Campañas que igualan y superan a las de las poderosas multinacionales de las bebidas colas.
Hablar hoy de los peligros para la salud que implica el consumo de Coca-Cola y similares o por citar otro caso, los riesgos de fumar, no sorprenden a nadie, todos estamos suficientemente informados.
Pero qué pasa con el reverenciado ALIMENTO LACTEO?

Próximamente un informe detallado de la inconveniencia de los productos lácteos para el consumo humano.

La leche de vaca y de otros animales no es un alimento conveniente para el organismo del hombre. Además, si le agregamos la insospechada manipulación que sufren éstos alimentos considerando que la adulteración en sí misma, comienza en el organismo vacuno, nos iremos formando de a poco un panorama muy diferente al que nos vende la publicidad.
Hoy día las vacas son alimentadas con balanceados de orígen tránsgenico, además el aumento de la extracción de leche por métodos artificiales y, finalmente la infinidad de procesos a los que se somete al fluído hasta que llega al consumidor la convierten en una verdadera bomba de tiempo.
Los lácteos no sólo no combaten la osteosporosis, la descalcificación, los problemas intestinales, sino que inducen y agravan éstos y otros problemas de salud.
En breve, los sólidos y contundentes argumentos que echan luz sobre el discurso dominante, que sólo se comprende si se observa detenidamente los poderosísimos intereses y las varias veces millonarias cifras que mueve la industria láctea.